COMUNICADOS: Un gesto histórico de APU hacia el periodismo del interior
La decisión de APU constituye un precedente: por primera vez el gremio mayor del país reconoce a un grupo del interior como interlocutor válido y legítimo en materia de derechos, seguridad y preocupación profesional.
PERIODISTAS EN RED /Desde Minas, Lavalleja Redacción digital de periodistasenred.uy
La jornada del 3 de diciembre de 2025 quedará marcada como un punto de inflexión en la relación entre la Asociación de la Prensa Uruguaya (APU) y el periodismo del interior del país. Por primera vez en su historia, la organización gremial más representativa del sector tomó en consideración formal una denuncia presentada por Periodistas en Red Asociados, colectivo que desde hace cuatro meses viene articulando, con escasos recursos y mucha convicción, la defensa de comunicadores del interior profundo.
La denuncia se refería a la agresión física sufrida por el presidente del colectivo, el periodista Román Nappa, atacado en Minas mientras realizaba su tarea. El episodio, que puso en riesgo su integridad y pretendió amedrentar su labor profesional, motivó una reacción inmediata de Periodistas en Red, que acudió a APU en busca de respaldo institucional.
En un hecho inédito, APU no solo tomó la denuncia sino que emitió un comunicado oficial repudiando el ataque, anunciando el envío de una delegación a Lavalleja para reunirse con autoridades y evaluando de primera mano la situación. Para un colectivo históricamente ignorado por los centros de poder de la comunicación capitalina, esta respuesta representa un reconocimiento largamente esperado.
La decisión de APU constituye un precedente: por primera vez el gremio mayor del país reconoce a un grupo del interior como interlocutor válido y legítimo en materia de derechos, seguridad y preocupación profesional. En un escenario donde los ataques a periodistas se han vuelto más frecuentes, este gesto no es menor. Es una señal clara de que el periodismo –todo el periodismo, también el del interior– merece protección, respeto y escucha.
No es poca cosa.
Es, en definitiva, el comienzo de un vínculo que podría cambiar la historia del periodismo territorial en Uruguay.
